Requiem para las Plantas de Biodiesel de España

14/05/2013.

La planta de biodiesel de Calahorra Iniciativas Bioenergéticas ha vuelto a presentar un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) de suspensión del contrato alegando «causas económicas, productivas y organizativas». Afectaría a 9 de los 19 trabajadores con los que cuenta ahora (el año pasado tenían 31, ha llegado a tener 37 y daban trabajo indirecto a otras 70 personas). A 6 de esos 9 se les suspendería el contrato completo hasta el 15 de enero y cobrarían el paro, y a 3 se les reduciría la jornada. Los trabajadores temen y cuestionan la viabilidad y cierre de la planta.

Este viernes, los empleados se reúnen en asamblea para decidir si acuerdan este ERE o por el contrario lo impugnan y van a los tribunales, porque, en principio no están de acuerdo con los términos que indica la empresa. En cualquier caso, la compañía podría ejecutar el ERE.

Desde Acción Sindical de USO su secretario, Jaime Calvo, explica que la compañía ha presentado EREs desde 2011, en mayo de 2012 se prorrogó, en diciembre de 2012 se presentó otro «que curiosamente se suspendió y retiró porque llegó producción a la planta y se volvió a producir», y ahora, han vuelto a presentar otro.

Iba a ser la mayor del país

Esta empresa nació en 2008 con unas grandes instalaciones en unos terrenos de 20 hectáreas en el polígono Recuenco y una inversión de 70 millones de euros. Se inauguró con la idea de ser la mayor productora del país y entre las mejores de Europa. En 2009 empezó a producir, pero la crisis en el sector, y la competencia desleal, según indicaban desde la compañía, de la entrada de este producto de otros países, les obligó a dejar la producción de biodiesel. Desde entonces su mayor trabajo ha sido el de comercializar carburante procedente de otros países. Aunque la fabricación ha sido intermitente, nunca ha llegado al 10% de su capacidad, explican desde USO. De hecho, la planta ha producido biodiesel durante los tres primeros meses del año, pero actualmente se limita a comercializar producto ya elaborado.

Los trabajadores cuestionan la viabilidad de la planta, son conscientes de que por el momento no se va a producir mucho más, y no entienden por qué alargan la vida en estas condiciones de una empresa que iba a producir 250.000 toneladas al año de biodiesel.

El problema con el actual ERE que presentan, añade Calvo, es que hay empleados que se quedan sin contraprestaciones porque incluso se les agota el paro por los anteriores expedientes. De hecho, dos se quedarían sin ninguna prestación en solo dos meses.