Un test rápido y barato para detectar los aceites y grasas no aptos para la cocina

02/07/2013.

Este test desarrollado en China consiste en el cambio de color de un aditivo al entrar en contacto con aceites tóxicos para la salud humana, siendo perceptible a simple vista.

En los últimos tiempos, los chinos han visto cómo se reciclaba el aceite de cocina, llegando a recuperarlo de las alcantarillas para reutilizarlo posteriormente. Éste, una vez refinado de nuevo o mezclado con grasas animales, era reutilizado para uso culinario.

Para identificar este aceite ilegal, el professor H. E. Yujian y su grupo del Colegio de Química de la Academia de Ciencias China, han diseñado un test rápido y barato para detectar in situ el fraude. El trabajo ha sido publicado en la revista Science China Chemistry.

La sencillez de las pruebas, que consisten en el cambio de color de un aditivo (perceptible a simple vista), en función de que se trate de aceite tóxico o natural, es una de sus mayores ventajas, lo que ha llevado a sus autores a patentar el procedimiento.

Problema sanitario

Muchos restaurantes utilizan este aceite ilegal con el riesgo que suponen los compuestos tóxicos que aparecen tras sucesivas frituras y un procesado irregular. Los efectos sobre la salud son los habituales de un envenenamiento, con la aparición de dolores de cabeza, vómitos y diarrea. También las familias hacen uso de este tipo de aceites, convirtiéndose en un problema sanitario nacional.

El Gobierno chino ha estrechado las medidas de control de las ventas de este producto, así como en la concesión de licencias para la venta de aceites. Por tanto, disponer de un método rápido que puede efectuarse sobre la marcha, sopondrá un importante recurso para luchar contra el problema alimentario que amenaza a la población china.

Fuente: ABC